La etiqueta de un producto no solo es la cara visible y la que aporta identidad, sino que es el medio por el cual captamos y atraemos la atención de nuestro potencial cliente. Cuando nos surge la pregunta de cómo hacer etiquetas para productos, podemos seguir una serie de pasos para que el resultado final sea eficiente y de calidad.

Al personalizar nuestra etiqueta, le damos a nuestro producto una identidad y un posicionamiento en el mercado. Por eso es necesario establecer los pasos para que nuestra etiqueta alcance las expectativas del mensaje que queremos transmitir de nuestros productos.

Paso 1: Establecer la información que tendrá la etiqueta

Es importante pasar en limpio toda la información que debe contener la etiqueta, para posteriormente saber cómo distribuirla.

Aquí debemos incluir el logo, eslogan, ilustraciones, descripción del producto, aspectos legales, entre otros detalles. Si es etiquetado nutricional, debemos incorporar los datos mencionados por la normativa vigente.

La información que almacenará nuestra etiqueta dependerá del tipo de producto que estemos vendiendo, para ello es necesario conocer con detalle y exactitud nuestro producto.

Paso 2: Elegir el material de la etiqueta

Cuando tenemos definida la información, debemos seleccionar el tipo de material con el cual desarrollaremos nuestra etiqueta. Aquí, no solo están incluidos aspectos relacionados con la estética y diseño, sino también con las características propias del producto.

Por ejemplo, si el producto debe ser conservado a temperaturas de refrigeración y puede mojarse, debemos seleccionar un material resistente al agua. En cambio, si un producto es expuesto a temperaturas altas, por la distribución en su zona geográfica, debemos escoger un material resistente a altas temperaturas.

Existen diversas maneras para fijar las etiquetas a nuestros productos, una de las más utilizadas son las etiquetas adhesivas, caracterizadas por su calidad, resistencia y practicidad.

Paso 3: Definir la forma de la etiqueta

Luego de seleccionar el tipo de material, tenemos que tener en cuenta la forma que llevará nuestra etiqueta. Y esta forma estará relacionada obligatoriamente con las características del envase de nuestro producto.

Las medidas de cada etiqueta se deben adaptar perfectamente a la estructura del producto, para evitar algunos inconvenientes, como posibles despegues de la etiqueta, o información oculta involuntariamente.

También la forma de la etiqueta es importante para saber cómo se va a adaptar de forma estética y decorativa al concepto de identidad de marca de nuestro producto.

Paso 4: Diseñar el contenido interno de la etiqueta

En esta instancia, debemos definir y seleccionar todos los detalles relacionados a logo, tipografía, colores, texturas, ilustraciones y demás. Es relevante que el texto y las descripciones sean claras y legibles, para evitar cualquier tipo de confusión o inconveniente.

En esta instancia es importante saber qué queremos transmitir y a quién deseamos vender nuestros productos personalizados. Debemos tener en claro que nuestro producto necesita ser correctamente expuesto. La etiqueta es el medio por el cual vamos a transmitir, no solo los detalles del producto, sino también fidelidad, valor, y posicionamiento de marca.

Podemos crear las etiquetas utilizando distintas plataformas especializadas en diseño, o delegar esta función a un diseñador gráfico.

Paso 5: Realizar una prueba y corregir detalles finales

Antes de encargar la impresión de todas las etiquetas, es oportuno constatar y corroborar cómo quedará el diseño final, realizando una prueba con una etiqueta instalada en nuestro producto.

A partir de allí, podemos corregir posibles fallas que solo se ven en la práctica, relacionadas al diseño, tamaño, u otros atributos.

Esta prueba nos evitará enormes pérdidas por mandar a imprimir un gran número de etiquetas que finalmente no alcanzan las expectativas instauradas en el planeamiento.

La importancia de una buena etiqueta

Tal como mencionamos más arriba, la etiqueta de un producto tiene muchas funciones: son la primera instancia de encuentro con el cliente y, por lo tanto, su diseño, calidad e información pueden influir en su decisión de compra. 

Por otra parte, las etiquetas para productos entregan información valiosa al consumidor antes de abrir el artículo, ya sea de la industria de la alimentación, electrónica, productos para el hogar, cosmética, etc. 

Además, la presentación que la marca ofrece a través de sus etiquetas es una forma de conocer el tipo de producto que ofrece en su interior. Debido a ello, representan una mirada a la marca que lo distribuye y sus características, versus otros de la competencia. 

¿Cómo hacer etiquetas para productos que destaquen? 

Existen algunos factores que puedes tener en cuenta para diseñar y crear una etiqueta llamativa y que destaque entre otras, por ejemplo: 

• Mantener un equilibrio entre color y espacio en blanco.
• Usar poco de texto y con información relevante.
• Utilizar fuentes de letras que se relacionen con el estilo de la marca.
• Utilizar una etiqueta de un tamaño adecuado para el producto.
• Implementar formas simples, como un círculo o un cuadrado.
• Ubicar de manera estratégica en el producto.

En IntegraMundo facilitamos el etiquetado personalizado de tus productos. Nuestras etiquetas autoadhesivas son resistentes y de alta adherencia, capaces de incorporarse a una amplia gama de superficies y variedad de productos.