El papel film, se comenzó a conocer por los años 70s, pero su comercialización e implementación relacionados con su uso, a partir de 1.977, de copolímeros EVA y LLDPE más tarde. El año 1.975 vio el comienzo de la producción a escala industrial, utilizando la tecnología en la burbuja, en el que la materia prima era una resina de elastómero con un grado de elasticidad suficiente, pero con una resistencia mecánica baja y los altos costos de producción.
Es una película estirable de alta transparencia, cuya resistencia mecánica y bajo espesor lo hacen especial para envolver o paletizar mercancía a un bajo costo, aplicado en forma manual.
- Para producción continua, se utiliza una película con características que permiten un mayor grado de exigencia para aplicación con máquinas.
- Para mantener un consumo estándar, se recomienda el uso de stretch film pre-estirado.
El filme, indispensable en el fulfillment, se fabrica a partir de la granza del polietileno (PE) y el polipropileno (PP) como los dos principales materiales utilizados. El film para enfardado de cargas se fabrica con Polietileno Lineal de baja densidad y se distribuye en bobinas de diferentes anchos, largos, espesores y características, como colores.
Este papel también conocido como Película Stretch, es un film de plástico que se utiliza para enfardar la mercancía sobre el palé. Por su facultad de estirarse sin romperse, se agrupa también dentro de los denominados films estirables.
Se pueden encontrar de 2 tipos de film:
- Film de polietileno en bobina para aplicación manual.
- Film de polietileno en bobina para aplicación con máquina enfardadora.
A su vez los film para máquina enfardadora se dividen en 3:
- Film en bobina ya pre-estirado, pero con un menor espesor que las películas tradicionales.
- Film impreso con el logotipo de la empresa u otros mensajes.
- Film estirable en malla o perforado, indicado para productos frescos.
Dentro de la amplia variedad de formatos de bobina que podemos encontrar dentro del Stretch Film, una de ella es en función del micraje del material, grosor de la bobina, el cual comprende desde un micraje de 7 micras, el cual se ha obtenido recientemente con innovadores técnicas de fabricación; hasta en film de 50 micras, el cual está cada vez más en desuso. Esto es debido a que no resulta rentable para el consumidor final su uso, al no poder obtener las ventajas que implica este producto como en su capacidad de estiramiento y adaptación al producto, su transparencia y fácil manejo.
